Las 5 libertades para fortalecer tu autoestima.

Las 5 libertades para fortalecer tu autoestima.



No debemos permitir que las percepciones limitadas de otras personas nos definan. Hay personas que tienen algo en común conmigo, pero nadie es exactamente como yo. Por lo tanto, todo lo que surge de mí es verdaderamente mío porque yo sola lo escogí. Virginia Satir.

Hola, ¿qué tal estas? Me encanta saber que estás ahí una semana más del otro lado oyendo lo que te quiero contar Y MAS FELIZ ME HACES CUANDO TE SUSCRIBES A ESTE PODCAST Y ME SIGUES EN Instagram. Para mí es un inmenso placer compartir contigo información que te puede ayudar con la autoestima o temas de pareja. Se que mis episodios ayudan mucho por la gente que me ha escrito agradeciendo y por varias personas que deciden hacer un proceso conmigo. Tengo muchos testimonios de ello. Estoy siempre investigando y estudiando para dar un excelente servicio en los procesos individuales. Mi web es elisaprieto.com y en Instagram soy elisaprieto8 por si me quieres contactar.

Los cambios no son fáciles y no tengo una varita mágica, ojalá la tuviera para quitar rápido el sufrimiento o el dolor que las personas sienten y me cuentan cuando me buscan para que les ayuden. No es fácil pero no imposible hay que querer este cambio y comprometerse. Aliviar el dolor sin hacer un trabajo de autoconocimiento y crecimiento personal es como poner una tirita sin curar la herida.

 Yo antes hacia eso. Iba a muchos talleres de fin de semana salía super motivada y empoderada de todo lo que había descubierto y en una semana o poco más el conocimiento se desvanecía porque no ponía en práctica lo que había aprendido con el terapeuta de turno.

Un día decidí hacer un trabajo profundo conmigo porque no quería volver siempre al mismo punto de partida y puedo decir que fue muy gratificante, a veces muy movido, con auténticas sacudidas emocionales, pero con un resultado maravilloso porque aprendí a quererme, a perdonarme, a respetarme, a ser valiente, a ser honesta conmigo misma, a no suponer lo que la otra persona está pensando, no cumplir las expectativas de los demás, en definitiva aprendí a ser yo misma y a amarme con mis luces y sombras.

No te voy a mentir. Hay momentos en que se cae todo incluida yo y te sientes perdida por momentos, pero desarrolle la resiliencia y salgo más fortalecida de cada caída. Mi lema pasó a ser que tengo que aprender de esto y por supuesto aprendí a gestionar mi miedo.

La frase que abre este episodio “no debemos permitir que las percepciones limitadas de otras personas nos definan” fue para mi uno de mis mayores aprendizajes porque hasta entonces la opinión de los demás me definían como persona, como profesional y hoy realmente no me preocupa lo que los demás piensen de mí. Lo más importante es lo que yo pienso de mí, que concepto tengo sobre mi persona.

Pues esta frase y la siguiente son de Virginia Satir una muy conocida, ya fallecida, psicoterauta norteamericana pionera en la terapia familiar. Ella creía realmente en el cambio y transformación del ser humano. De hecho, ella dice “si la persona se libera de sus miedos y despierta su coraje y capacidad para vivir su presente, permite la transformación, para “convertirse en plenamente humano”. ¿Interesante no?

Hoy quiero compartir contigo sus 5 libertades para fortalecerte.

La libertad de ser y escuchar lo que hay.

Esta libertad está directamente ligada a la importancia de vivir en el presente, en el aquí y ahora. Normalmente nos proyectamos al futuro con una visión negativa y nos invade la ansiedad, el miedo o estamos enganchados al pasado provocándonos nostalgia y tristeza. Al centrarse en el presente seremos más libres para tomar decisiones sin muchos condicionantes y seremos más auténticos por la conexión con una misma.

La libertad de decir lo que siento y pienso.

Aquí no hay mucho que explicar porque está claro. Decimos menos de la mitad de lo que nos gustaría por miedo a ofender, a que no nos quieran, a que nos dejen. No pasa nada que expreses lo que verdaderamente piensas y sientes desde el respeto y con intención de un dialogo reflexivo.

La libertad de sentir lo que siento.

Parece obvia esta libertad, pero no lo es. Sentir lo que siento significa reconocer las emociones y expresarlas. Muchas veces las reprimimos porque no es muy agradable sentir la rabia, la tristeza, miedo. Las emociones nos ayudan a conocernos y ellas son el motor de nuestras acciones.

La libertad de pedir lo que quiero, en lugar de esperar el consentimiento ajeno.

No podemos esperar que las personas adivinen lo que necesitamos. Tenemos libertad de elegir y de pedir. Para mucha gente es fácil pedir y para otras no. A las personas con la autoestima baja creen que no tienen derecho a pedir y mucho menos elegir. No tengas miedo a pedir, estás en tu derecho.

La libertad de correr mis propios riesgos en lugar de conformarme con la seguridad.

Esta libertad, desde mi punto de vista, es quizás las más difícil para la mayoría de las personas porque ella te invita a salir de tu zona de confort y sé que cuesta mucho aventurarse en algo nuevo, cuesta mucho correr riesgo. Siempre estamos luchando por la seguridad, por la estabilidad y en realidad es tu cerebro el que dice no te arriesgues porque gasta mucha energía. Y tiene razón, pero no hacer nada para mejorar o cambiar tu vida es muy frustrante.

Queremos seguridad, pero nos aburrimos soberanamente. A la mayoría de nosotros y a nuestra propia naturaleza le va más la aventura, la incertidumbre. Si todos los días son iguales el sistema de recompensa no se activa y eso sí que nos gusta. Sentir un poco de miedo y adrenalina en el fondo nos encanta. Hace que nos sintamos vivos y felices por haber superado un reto o logrado un objetivo en el trabajo o resuelto un conflicto de pareja. Todo es motivo de celebración. Y nos encanta una fiesta.

La poca aventura en la pareja, el que no haya innovación en el terreno sexual, el hacer siempre lo mismo, lo que llamamos de caer en la rutina, mata a la pareja.

Y si no ejercitamos esas 5 libertades de ser, de decir, de sentir, de pedir, de correr riesgos, no seremos nosotros mismos, no seremos seres auténticos y por lo tanto no podemos compartir nuestro autentico ser. Solo estaremos cumpliendo las expectativas de los demás.

Y con respecto a la pareja Virginia Satir escribió:

Quiero poder amarte sin aferrarme, apreciarte sin juzgarte, encontrarte sin agobiarte, invitarte sin insistencia, dejarte sin culpabilidad, criticarte sin censurarte, ayudarte sin disminuirte. Si quieres concederme lo mismo, entonces realmente podremos reunirnos y ayudarnos a crecer mutuamente.

Maravillosa receta para tener una excelente relación de pareja.